domingo, 24 de diciembre de 2006

SE VA EL 2006

Fin de año… y nuevamente hora de hacer balances… evaluar el año que está a punto de terminar… pensar si se cumplieron mis expectativas… y si no las había… pensar en cómo me sentí… Y pretendo mirarlo desde una perspectiva de comprender lo generoso que ha sido… y entender que lo que se me ha negado, ha sido porque no era el momento… no era para mí… o simplemente así debía ser…

No se trata de resignarse, simplemente se trata de comprender con el corazón…

Miro hacia atrás y me hago responsable de cada uno de los días del 2006…

Difícil año laboral… pero así como difícil ha sido, me ha permitido encontrar la confianza del quehacer profesional… de caminar con la seguridad de que cada paso que doy tiene el peso de las herramientas adquiridas con la experiencia… el peso de lo que se hace con el corazón… No me equivoqué al elegir la educación como opción de camino… Siento que en lo profesional es tiempo de agradecer y pensar, ambas cosas ligadas esencialmente, pues para pensar se exige previamente agradecer… agradezco por el tiempo de cosecha… lo que es arriba, es abajo… la siembra ha dado frutos… Hay mucho por aprender y sembrar aún… pero es indiscutible que una buena cosecha es el aliciente para seguir adelante con la convicción de ir por el camino correcto…

En lo personal…la conquista de mi espacio habitable me ha permitido ser como soy… mis premisas de vida se expresan por todos los rincones de mi hogar…

Queda mucho por hacer y lograr… ha sido un año cargado de nostalgias… y en las nostalgias espían los eternos ausentes… que saben y no saben… que sienten y no sienten… como si el tiempo fuera de cristal… la nostalgia es parte de la vida… pero no debe constituirse en un hacedor de vida…

Fin de año… hora de ir cerrando capítulos, para poder iniciar nuevos escritos sin cosas pendientes… opto por trabajar en cerrar aquellos procesos que se han dilatado por mucho tiempo… he avanzado bastante en esta tarea… los pequeños signos son muestras de grandes pasos… viene entonces la sensación de irse de a poco abuenando con la vida…

Cada vez me acerco más al manantial de mí misma… ha sido un año extraño… de grandes exigencias, de no dar la tregua que esperaba después de un violento año 2005… tal vez no era tiempo de treguas… había cosas que debía aprender ahora o ahora… y cada hora llega en el minuto que debe ser, sin importar si venimos de tiempos difíciles… Me pregunto frente a lo que voy vivenciando en el día a día… ¿Qué debo aprender con esto???... la respuesta no es siempre clara, pero siempre llegó, llega y llegará el minuto de decantar y comprender…

Ha sido un año de sensibilizarse profundamente con todo lo que me rodea… he adquirido la certeza de que el azar no existe… y que aquello que llamamos coincidencias… son las manifestaciones del manantial de fuertes energías… se trata de aprender a vibrar en armonía… (gracias Dr. Bach)

Repito o reafirmo lo de balances anteriores… confío en que los vientos soplan a favor… me dejo llevar… cierro los ojos…no estoy sobreviviendo, estoy viviendo…

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