domingo, 15 de junio de 2008

Iluminación



Los intestinos se retuercen hasta el cielo
las tripas llegan a la iluminación más que el cerebro
se siente desde las entrañas
desde ahí se comprende lo que el alma desea
no se trata de entender
se trata de sentir
el sentir ilumina la verdadera comprensión
la integración de lo esencial
y tras las cavilaciones del viento
los giros del sol
el estirarse de la piel
el húmedo grito nocturno
llega la iluminación
en el encuentro del arriba y del abajo
en ese cruce
nace la luz.