jueves, 21 de diciembre de 2006

A través de Huidobro...

Ahora que mis ojos vuelan entre planetas ajenos
como una botella en alta mar...
Sin una sola casa donde entrar en la tarde
Ahora que mis manos escaparon del fuego en una barca tan rápida como el ocaso...
Hace frío porque se han dicho palabras tristes... se ha dicho barca... ocaso... y ojos...
Que son una misma cosa.
Yo amo el viento que viene de los astros...
Yo amo los ojos de grandes alas
Y amo el ocaso tan rápido como una barca
Y las manos... y la montaña que se deja acariciar
Y una roca llena de amor que desafía al mar
Y un mar que desafía todas las estrellas...
Unos ojos y unas manos salvadas del incendio
Un corazón que late...
Una selva encima de una selva
Para la ternura de los pájaros perdidos
Allá tan lejos de su país natal...

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